Ambas imágenes de portada cortesía de A Hug
A pesar de las múltiples incógnitas que nos depara este momento incierto, parece lógico pensar que la revolución a nivel moda pasa sí o sí por adquirir menos y mejor y por acotar nuestro consumo a dos tipologías de productos moda:
… Nuevas prendas y accesorios diseñadas, producidas y distribuidas con estándares de calidad exigentes a todos los niveles de modo que puedan durar el máximo tiempo posible incorporándose a la rueda de la circularidad.
… Prendas, accesorios y materiales pre-existentes cuya vida actual ya no tiene un sentido y pasa a convertirse en algo de mayor valor, o lo que es lo mismo, aplicar UPCYCLING.
A día de hoy no hay un término en español que defina este concepto, pero la realidad es que hasta hace dos generaciones estaba integrado y se practicaba en lo cotidiano.
El propósito de l+s diseñador+s en los últimos 20 años se ha transformado: ya no es solo querer expresarse y para eso producir una colección exuberante, necesitando inversiones inalcanzables y obviando todo el impacto que esto pueda ocasionar.
Ahora se vuelve ineludible atender cualquier proyecto como algo que se sostenga 360º, tanto si hablamos de moda funcional como artística, y por supuesto cuando confluyen ambas intenciones. Los incipientes modelos de negocio basados en re diseñar y reparar prendas y accesorios se van a multiplicar en los próximos tiempos.
Atención a la cantidad de stock almacenado en estos últimos meses y siguiendo…
El aumento exponencial de proyectos basados en el upcycling era ya una realidad pre-COVID, pero ahora esa tendencia se ha visto acelerada porque no se trata sólo de que el sistema quiera ayudar a la sociedad a mejorar, sino que esta realidad austera en términos de recursos y de medios, será la que marque la pauta de los avances de la industria de la moda.
Y cómo no, esto se aplica al nuevo accesorio de moda contemporáneo, la mascarilla, que se ha convertido en protagonista y blanco certero de las marcas para reutilizar sus excedentes. Algunos ejemplos preciosos: Collina Strada, BIIS, Marine Serre.
Por todas estas razones y más, en LMQNP vamos a caminar de la mano del UPCYCLING, y para abrir el melón os traemos 5 proyectazos que nos parecen irresistibles y que dejan entrever en los diseños finales los elementos de partida. Allá van:
Formada en la London College of Fashion, esta diseñadora Rumana ha roto esquemas con su producto estrella: una suerte de sneaker y zapato de tacón de factura impecable que ha enamorado a la industria y que abre caminos de experimentación en el upcycling de accesorios. Sus diseños son caramelos de colores, son piezas clásicas nada más haber nacido. Indaga en las diferentes posibilidades de los patrones y hormas de las zapatillas para conseguir collages 3D. Especial interés despierta su lado subastero, no digo más.
ALMOST ON TIME
Kayla Sade no revela demasiado sobre su joven proyecto basado en San Francisco. Lo define como un espacio de experimentación a largo plazo donde, de un modo manual y por lo tanto lento, desmonta piezas deportivas y las convierte en maravillosos corsés. Los precedentes de rigidez e imposición de esta pieza histórica se derriten al introducir los puntos de algodón, pasan a ser prendas amables y amorosas. Los detalles y su manejo de los logos son impresionantes. Vende por encargo a fans con mucha paciencia.
La artista Joana Duarte vuelve de una estancia en India consciente de la necesidad de reutilizar y del poder de los materiales. En su proyecto experimenta con piezas de artesanía y tejidos tradicionales portugueses con la intención de ensalzar y promover la herencia cultural de su país. Manteles, sábanas, bordados… transformados en piezas preciosas que, colocadas en contextos costumbristas, consiguen una fusión súper interesante e hipermoderna del imaginario luso. Ay Portugal, cuántas alegrías nos das.
Esta diseñadora bratislava afincada en Berlín aplica su formación en Desarrollo Sostenible a un proyecto que nos entusiasma por sus prendas potentes, por la fuerza y frescura de su imagen y por su convencimiento de que la ropa que descartamos es una fuente constante de posibilidades para proyectar e impactar positivamente en la sociedad. Importante para espíritus inquietos: está abierta a colaboraciones, infórmate en su web.
Alex Henkes, alma de A Hug, diseña desde Madrid piezas inteligentes y muy trabajadas que parecen concebidas para sentir abrazos al verlas y al vestirlas, y que se pueden llevar de mil formas diferentes. Podemos detectar inspiraciones japonesas o inglesas pero el ejercicio de sastrería al que somete a prendas ya existentes y unos códigos estéticos muy personales, dan como resultado un estilo único. Su amplia formación y experiencia en sostenibilidad le permiten asesorar a marcas y compartir sus conocimientos como docente.